Valle del Salcedón, noviembre de 1693.Una prostituta da a luz. Dos frailes se hacen cargo de la joven madre y su fruto, a la par que unas muertes muy poco convencionales comienzan a prodigarse por el valle. Los frailes tratarán a partir de entonces de hacerse cargo de la pequeña familia, esclarecer las muertes, y a su vez, sobre todo uno de ellos, de enfrentarse a sus propias convicciones morales y religiosas. Pero ambos frailes, que no son lo que parecen, han de dejar asuntos pendientes: una antigua y temida hermandad de la que forman parte, les reclama para terminar el trabajo para el cual se les captó en el pasado. Deberán entonces partir a cumplir con su cometido a la corte del rey. En los años venideros se mezclarán en sus vidas su fe, su deber, las creencias de su tierra, la inquisición… y procurarán impedir que se cumpla una terrible profecía.
Mientras todo esto ocurre, un misterioso hombre recorre los campos de batalla de Europa, cumpliendo la promesa hecha ante el cadáver de su madre.