¿Te han instruido en educación sexual? O, lo que has aprendido… ¿viene dado por lo que ves continuamente en películas y vídeos pornográficos?
Sí, humanos: hoy en la bitakora vamos a hablar de “eso”.
Lo primero de todo que quiero que asimiléis, es que le debéis la vida al sexo. Es irrefutable: todos sois producto de un revolcón que vuestro padre y vuestra madre tuvieron. Hasta los curas. Y las monjas. Incluso los humanos más insospechados que podáis imaginaros… que digo yo… ¿el Dalai Lama o el papa de Roma…? ¡También!
Según lo que la Iglesia os ha metido en la sesera, la única persona que nació en este mundo, sin mediar sexo de por medio, fue Jesús de Nazaret. El argumento es que fue el Espíritu Santo quien descendió del cielo, en la forma de una paloma o de un “algo” luminoso, y la madre de Jesús se quedó en estado de buena esperanza.
No voy a entrar en discusiones teológicas. A saber qué fumó el que escribió eso. Espero, empero, que comprendáis que yo, el Basajaun, no me trague esa historia. Solo es una fábula. Puedo respetarla, como respeto el cuento de Caperucita Roja. Un cuento donde mi buen amigo el lobo, compañero de aventuras y desventuras en estos bosques que tanto amo, sale siempre mal parado. Mekatxis…
Al hilo de esto, compartiré con vosotros un chiste que me contó el Tarttalo hace tiempo…
Caminaba Caperucita por el bosque, cuando, de pronto… ¡apareció el lobo feroz!
- ¿Dónde vas… Caperucita…?
- ¡A lavarme el coño a la fuente…!
- ¡Joder…!—dijo el lobo— ¡Hay que ver lo que ha cambiado el cuento…!
En fin, sigamos…
Como os venía diciendo, esta historia de la Biblia no me parece la mejor manera de tratar de elevar a los altares divinos a la perfecta mujer inmaculada. Pero sí la única manera de tratar de convencer a los humanos de hace más de un milenio… de que la Virgen María era una mujer pura y casta. Obvia recordar, la Iglesia, que se sabe perfectamente que Jesús tuvo hermanos. Y para tener a estos… a la Virgen María no la bajó a visitar una paloma dorada y resplandeciente. Doradas fueron las noches que esta mujer, una gran mujer, sin duda, pasó con José en la cama.
El sexo, históricamente, ha sido visto, pintado, contado y descrito, como algo malo. Traspasado de padres a hijos como una manera de hacer algo que a todos los humanos les gusta… pero que es un “algo”… tabú. Eso sí… asumido como algo donde el hombre es quien manda, y la mujer… bueno, pues que se ha de limitar a abrir las piernas.
El problema, para ellas, es que la que se abre mucho de piernas, es una puta. Y la que no se abre es una puritana o una frígida. Sea como fuere, lleva siempre las de perder. Coños con patas para el disfrute de los hombres.
Si es que a estos desechos humanos se les puede denominar así, claro está…
Empezaba esta entrada haciendo una pregunta:
¿Te han instruido en educación sexual?
La respuesta es complicada.
Si lo que sabes del sexo te viene dado por lo que te ha contado la Iglesia, mal asunto. Para ellos solo cuenta el disfrute del hombre, no el de la mujer.
Sexo ha habido desde siempre. Si no… nadie estaría pululando por ahí… Y si lo que estos señores (amparados en lo que se dice en un libro que ha vendido millones y millones de copias… menudo negocio tienen montado, tú…) es lo que crees… pues mal vas. He dicho señores, no señoras. Quédate con ese dato.
Como te iba diciendo… unos señores estos, que intentan adiestrar en base a la castidad y la sumisión de las mujeres… y que no se ponen ni coloraos cuando salen a la luz casos de violaciones de niños y niñas por parte de curas y demás… pero que basan una parte muy importante de lo que predican, en las enseñanzas de una Biblia que ve a las mujeres como un mero objeto sexual que debe tener la casa y la familia cuidada y en condiciones.
Y sin descuidar una cama que tiene que estar siempre caliente.
Una hipocresía que traspasa el propio sexo y que se ha adueñado de la sociedad. ¿Que no? Mira esto:
Por supuesto, no meto a todos los miembros de la Iglesia en el mismo saco. No sería justo. Pero son estas ideas, la mujer es un coño con patas, las que han creado una sociedad misógina secular… que extiende sus tentáculos a humanos de cualquier creencia: cristianos, musulmanes, judíos… Es decir: no importa la época; no importan las creencias. Sexo se ha practicado siempre, cualquier tipo de sexo, y siempre ha sido mostrado de la misma manera: el hombre dispone de la mujer como quiera.
Para ellos, la carne que rodea el coño tiene nombre: mujer. Y, por ello, muchas se sienten feas. Aunque para mantener sexo… todas tengan lo mismo.
Repito: no son todos iguales, pero… es lo que hay. Una sociedad misógina, puritana y casta, que cuida incluso que los más jóvenes no se masturben: cosas del diablo. Una sociedad, en la que el que mantiene relaciones sexuales con personas de su mismo sexo, es una asquerosa tara de la naturaleza. Un mundo este, donde existen rancios y retrógrados que creen que cualquiera que mantenga relaciones sexuales que se salgan de lo normal… son poco menos que aberraciones.
Sí, sí… has leído bien: lo que ellos llaman maricones y bolleras… ese sexo “raro” que parece ser que a muchos les encanta (Cincuenta Sombras y demás…)… y un largo etcétera.
Y siempre, o casi siempre… el macho manda, y la hembra traga y calla.
Aquí, me gustaría lanzar una pregunta. Una pregunta que no es nueva, y que ya aparece en Mano grande, mano pequeña:
Si un cura “se toca”…
… ¿se queda ciego también? ¿Dios les deja hacer “eso”?
Ahí lo dejo.
Si lo que sabes del sexo te viene dado por lo que te pudieron enseñar en la escuela… mal vamos también. Los colegios, en materia sexual, son meros satélites de las enseñanzas de la religión que impere en un país. Y creo haber dejado claro ya, que no importa si las creencias religiosas de ese país son unas, u otras. En todas, el hombre es el que lleva la voz cantante. En todas, la mujer está para que el hombre disponga de ella a su gusto.
Si lo que sabes del sexo, te viene dado por lo que has aprendido al ver follar en la caja tonta, en el ordenador o en el móvil… permíteme que de diga un par de cosas.
Esas mismas películas pornográficas, que tanto éxito tienen y tendrán siempre, son parte del pan y circo de hoy en día, muestran también a las mujeres como un pedazo de carne con patas. Una manera de mostrarlas, influenciada por lo que siglos de misoginia os han metido en la cabeza. Pero hay algo que, cuando las veis para pajearos como monos, pasáis por alto: las mujeres que salen en esas películas son actrices. Solo representan un papel. ¿Y qué hacen? ¿Qué ofrecen… no solo ellas, sino esta industria pornográfica? Dan a los consumidores lo que quieren.
A pesar de todo, los sexólogos afirman, con buen criterio, que masturbarse no solo no es malo, sino que es necesario. Aunque solo sea, algo que ellos mismos corroboran, como una manera de conocer vuestro cuerpo. Y follar tampoco es malo, os hayan dicho lo que os hayan dicho, aunque solo sea para pasarlo bien… y no con el fin de procrear. No me seáis estúpidos y hacedles caso.
Tanta hipocresía me lleva a compartir con vosotros un vídeo que me llamó la atención. Sí, es publicidad, al igual que el anterior vídeo. Pero creo que su mensaje va más allá. Noventa segundos brillantes:
Para finalizar, me gustaría terminar con una pequeña reflexión que te hará pensar…
Nadie, y digo nadie, se ha lamentado en su lecho de muerte por haber follado demasiado.
Nadie.
Un comentario
Kuanta razón tienes…kizás el kompartir esto me traiga algún disgusto,pero aún así lo he kompartido.Gracias y Buena’s notxes.