Hoy Mikel ha jugado su primer partido de liga.
El segundo de su vida.
No, no ha agredido a nadie. Porque nunca lo hace más allá de lo que pueda corresponder a cualquier niño de su edad. Así que tampoco ha sacado una «cadena de candado» del bolsillo, no ha infringido las normas, ni ha asustado a los demás niños, queridos padres quienes tanto miedo le teníais. Tampoco lo hizo en vuestro equipo.
Pero sí se podría haber tirado al suelo exagerando un pequeño roce de un contrario, o podría haber sido el único que proteste al árbitro porque a un compañero le hacen una falta y no la ha pitado, como hizo en el primer partido. Pero no lo ha hecho.
Y no, autismo NO es igual a violencia ni a agresividad. Para hablar sobre un tema mejor si se está bien informado. Más si se va a escupir. Invito a armarse del valor suficiente como para querer descubrir qué significa tener cualidades diferentes en un mundo tan «perfecto».
Autismo, Hoy, ha significado pasarse el partido recordando los consejos de sus padres para hacerlo lo mejor posible. Así me lo ha confesado. Y así lo ha hecho: ¡¡¡de maravilla!!!
Era así de «fácil» conseguir que fuera feliz sintiéndose parte, como los demás. Sólo hay que dejar el miedo, los estereotipos y las etiquetas atrás, no estamparlas en vuestra mente (que no en la suya).
Gracias a ese coordinador, y sobre todo a esos maravillosos padres que nos han ayudado a que formara parte de este equipo sin pensarlo.
Me apiado de aquellos que dieron una lección tan pésima a sus hijos, la cual lamentablemente nunca olvidarán. Al igual que no olvida Mikel, quien continúa llorando, y añorando enormemente a sus antiguos compañeros.
Gracias también a todos y cada uno de los Clubs que se pusieron en contacto conmigo deseando incluir a Mikel.
Gracias a cada una de las cientos de personas, anónimas y no tanto, que me han escrito para transmitir su cariño hacia el niño y su indignación por lo sucedido. Me resulta imposible contestar a todos, pero no he dejado ninguno sin leer.
Por todos esos escritos que habéis enviado a modo protesta, gracias. Por vuestros preciosos poemas, vídeos, consejos que tanto me han servido, detalles y gestos inolvidables, y llamadas que habéis realizado por Mikel. Gracias a ello habéis contribuido a redirigir su mala experiencia y abrir un nuevo capítulo en su vida.
Gracias a las instituciones que nos habéis apoyado, y ojalá estéis en lo cierto y al menos esto haya servido para modificar algo muy importante, sobre lo erróneo pero firmemente establecido. Ojalá ningún niño más sufra lo que ha tenido que vivir Mikel.
¡Ah! Han perdido. Pero no es la victoria el máximo valor resultante de un partido entre niños. ¿Verdad?
Hoy Mikel se ha ido Feliz a dormir.
Y no, no era tan difícil.
Zuriñe Asensi, amatxu de Mikel.
Esta es la carta de una agradecida amatxu. Al leerla, denota una especie de liberación de la rabia acumulada. Rabia compartida por familiares y amigos. Rabia que hará que alguno se dé de cabezazos contra la pared, al comprobar cómo han intentado traspasar sus miedos y vergüenzas a un niño, y cómo ese niño les ha dado una lección a todos. Carta que demuestra que, una vez más, no quedarse de brazos cruzados tiene recompensa. Aunque muchos sigáis pensando que luchar no sirve de nada.
No es la primera vez que escribo sobre Mikel. Espero, empero, que sea la última. Espero que se le deje disfrutar de su niñez como él, y todos los niños del mundo, se merecen. También espero, que pueda disfrutar con sus nuevos amiguitos, de esta nueva y maravillosa oportunidad. Y no espero, porque no espero nada de ellos, que los que cometieron esta tropelía contra un niño de nueve años (nueve años… : no sé cómo no se os cae la puta cara de vergüenza al suelo)…
… sientan la carta de Zuriñe como una espina que se les clave en lo más profundo del alma.
Obviando a estos cobardes humanos, a los que consideraron que Mikel no podía jugar con los demás por ser diferente, hay algo que me ha llenado de orgullo. Sí. Y lo habéis hecho vosotros: mis despreciables y queridos humanos.
En esta segunda carta, Zuriñe pretende dar un zasca en toda la boca a aquellos que trataron a su hijo como si fuese un objeto. Demostrado quedó entonces, y se corrobora ahora, que Mikel vale más que todos ellos juntos. No le llegan ni al barro que se le quede pegado en sus botas de jugar al jurgol.
Tras la primera carta de Zuriñe, y a la par que se hacía viral, también se dieron otra clase de muestras hacia Mikel. Muestras, que poco tienen que ver con lo que algunos pensaban de él: cientos de testimonios de apoyo por parte de ciudadanos anónimos… mensajes de ánimo en los que se conminaba a la familia a que no se rindiese… prensa escrita y audiovisual haciéndose eco de esta inmoralidad…
… y de entre todas esas muestras de apoyo, quería hacer especial hincapié en alguna de ellas. ¿Cuáles? Podrían ser todas, por supuesto, pero me gustaría ponderar en el Ágora de la bitakora, las que se produjeron por parte de diferentes clubes de jurgol, que ofrecieron a Mikel la posibilidad de… ¿jugar?
No. Solo le ofrecieron la posibilidad de ser un niño. Para ellos, a la par que para su familia y amigos, y sin olvidar, por supuesto, a Mikel, van los mejores deseos del Basajaun desde esta entrada de la bitakora.
Habréis notado, espero que sí, que, en esta segunda carta, Zuriñe vuelve a ser… políticamente correcta. Bravo por ella.
Yo, no puedo.
Yo, desde los bosques de mi amada Euskal Herria, vuelvo a alzar la voz. Una voz que será, de nuevo, la de Mikel:
A los que no dejaron jugar a Mikel al jurgol:
A ver… soplapollas…
¿No se supone que no podía jugar al jurgol? ¿Qué ha pasado con aquello de que una persona diferente no es válida ni apta para ser, o intentar ser, como los demás? ¿Me queréis explicar cómo cojones vais a maquillar ante sus antiguos compañeros de jurgol, que su amigo no va a poder jugar con ellos porque es diferente? ¿Dónde encontráis aquí el raciocinio, imparcialidad y buen juicio, que un educador se supone que debe tener para con sus alumnos? ¿Acaso los que no tienen juicio son los que sí que le permiten jugar y comportarse como un niño?
La vida ya les va a dar a todos esos niños suficientes hostias cuando sean adultos. ¿Por qué queréis empezar tan pronto a enseñarles la mierda de vida que les espera cuando tengan vuestra edad…?
Yo os lo diré:
Porque vuestras patéticas existencias solo encuentran la manera de sentir que sois algo, cuando intentáis quedar por encima de los demás. Sin embargo, esto que habéis hecho, os traerá consecuencias. Sí, a vosotros: cada vez que uno de sus antiguos compañeros pregunten por Mikel, estarán dando una bofetada con toa la mano abierta en aquello que llamáis moralidad. Bofetadas que se unirán a las de sus nuevos compañeros de jurgol. Niños que han demostrado que un niño… solo es un niño. Niños que os han quitado vuestras putas caretas de mierda, y os han mostrado cómo sois realmente.
Qué poquito valéis, en este, un mundo del revés: niños dando lecciones a los adultos.
Jugar Vs ganar.
Solo me queda una cosa que decir. Espero que entendáis, que sea para Mikel:
Mikel, txapeldun…
Cuando, dentro de unos años, seas un poco más mayor y eches la vista atrás… tal vez recuerdes todo esto. Tal vez no. Pero ten presente siempre que cuando te quisieron ningunear, cuando te quisieron arrebatar la posibilidad de ser solo un niño, cuando quisieron robarte el derecho a poder disfrutar y jugar con tus amigos… tú solo perseguiste tu sueño…
… y ten muy presente también, que, en este tira y afloja entre la hipocresía y la razón…
… cuando ellos lo intentaron…
… tú lo conseguiste.
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